Respuesta a brotes de enfermedades infecciosas: el ciclo explicado desde la perspectiva de la COVID-19

El ciclo resaltado en el diagrama anterior describe diferentes etapas del enfoque de salud pública para responder a las BEI transmitidas de persona a persona, como los coronavirus. Las etapas son las siguientes:

1. Preparación

En esta etapa, los gobiernos y las comunidades son conscientes de la enfermedad y establecen políticas y sistemas para guiar la respuesta y la recuperación. Las actividades de preparación nacionales y locales pueden tener lugar antes o después de un brote (en preparación para un segundo brote).

2. Respuesta

En esta etapa, el país ha detectado casos de la enfermedad. Las medidas se adaptarán al contexto e incluirán:

a. contención, como el aislamiento de individuos o la restricción de los contactos según la interacción sospechada o conocida con la enfermedad;

b. control y mitigación, o medidas de control de la población a nivel social que son determinadas y monitoreadas por los gobiernos (como la restricción de la circulación y el cierre de escuelas, tiendas, restaurantes, servicios, etc.).

3. Transición y recuperación

A medida que las tasas de infección descienden, las comunidades comienzan a abrirse de nuevo, lo que se refleja en el relajamiento gradual de las medidas de salud pública. La enfermedad define el movimiento, por lo que cada contexto es diferente.

Ciclos entre etapas

Dado que las etapas de los BEI son dinámicas, los brotes no permanecerán necesariamente en la etapa de recuperación. En muchas comunidades, la enfermedad comenzará a propagarse de nuevo. Los actores volverán a la etapa de respuesta, con un renovado aumento de las medidas de contención, control y mitigación, y luego de nuevo a la de recuperación y preparación. Por ejemplo, en la pandemia de COVID-19, muchos países y regiones dentro de los países han experimentado estos cambios entre etapas, lo que demuestra la necesidad de hacer un monitoreo constante y adoptar enfoques ágiles y adaptativos al responder a los BEI.

Implicaciones de la preparación y la respuesta para los niños y niñas

Algunas de las medidas de preparación y respuesta aplicadas por las autoridades para prevenir y controlar la propagación de enfermedades (como el confinamiento domiciliario, el cierre de escuelas y las restricciones de movimiento) perturban la rutina y el apoyo social de los niños, al tiempo que suponen nuevos factores de estrés para los padres, los cuidadores y las familias.

Las repercusiones de las medidas de salud pública en las personas, las familias y las comunidades pueden incluir una nueva y mayor incidencia de la estigmatización, la discriminación, la desigualdad de género, el hacinamiento, la pérdida de medios de vida y la pobreza en diversos entornos. Esto se ve agravado por la falta de apoyo a la protección y hace que los niños sean más vulnerables a la angustia psicosocial y al maltrato, con inclusión de la violencia, el abuso y la explotación.

Implicaciones de la transición y la recuperación para los niños y niñas

Conforme se relajan las medidas de contención y se restablecen la movilidad y las interacciones con la comunidad, se presentan nuevos retos, y las medidas y los enfoques de protección de la infancia también cambian. Esto se experimenta de forma diferente en distintos contextos, ya que los niños y las familias pasan de la “respuesta” a la “transición y recuperación”.

Su tarea

• ¿Puedes identificar en qué parte del ciclo está tu contexto? ¿De qué manera cree que cambiará su etapa del ciclo en los próximos meses? En el hilo de abajo, comente su situación actual (incluido el país) y haga cualquier pregunta o reflexión clave a lo largo de las próximas semanas y meses.